Mientras estábamos en 2ª División, era en cierta medida comprensible que la pre-temporada fuese, digamos, light, en el sentido de que la Unión Deportiva Las Palmas no se enfrentaba a equipos de renombre para apurar una puesta a punto exigente. Así se había concebido la pre-temporada en el Sur de la Isla, jugando con una selección de jugadores de la zona, con la única preparación de correr tres o cuatro días para que, al menos físicamente no se viniesen abajo en unos cuantos minutos. El Presidente amarillo, que ahora es Presidente de un equipo de 1ª División debe cambiar el chip y no seguir ejerciendo como Presidente de 2ª División. Esos partidos ante una selección de aficionados que solo se han preparado, vuelvo a recalcar, corriendo tres o cuatro días, deben de ser descartados. La única exigencia hasta el presente ha sido la Copa Mahou, dos partidos ante el C.D Tenerife, más que nada por el ardor extremo de los tinerfeños cuando se enfrentan al cuadro amarillo. En este sentido parece que se exigirá al Valencia C.F y al Sevilla F.C. a cumplir sus compromisos contractuales derivados de los traspasos de Jonathan Viera y Vitolo, respectivamente. Se desconoce si estos equipos cumplirán lo pactado, porque hasta la fecha han pospuesto la celebración de estos encuentros. Se desconoce, igualmente, si en ambos contractos había algún tipo de penalización por incumplimiento. Recuerdo que en la conocida como época dorada del club, se jugaban en pre-temporada varios partidos con equipos de nivel: Marítimo. Os Belenenses, A.E.K. de Atenas, incluso creo que una vez rindió visita el Partizan de Belgrado. Ahora la Unión Deportiva Las Palmas es equipo de Primera División y necesita enfrentarse a equipos de buen nivel para empezar la Liga con un grado alto de rodaje. No podemos iniciar la etapa de rodaje durante la competición porque sería muy peligroso.