¡Im-pre-sio-nan-te!

Júbilo hasta el éxtasis por este tramo final de Liga de la Unión Deportiva Las Palmas. ¡Qué espectáculo! No hubo ayudas arbitrales. En realidad no fueron necesarias. La segunda parte deparó un deleite para los sentidos con ruletas, taconazos, caños, goles de bella factura…. La guinda de tanta excelencia la puso Wakaso Mubarak con un obús parabólico que el público acogió como se merecía. Ahora sí se puede decir que la Unión Deportiva Las Palmas seguirá otro año más en la División de Honor, o, como decía el prestigioso periodista, Pascual Calabuig, División del Honor.

Las estadísticas, a las que soy muy aficionado, revelan las siguientes cifras. La Unión Deportiva Las Palmas ocupa el décimo noveno puesto en la Historia de la liga, con 980 puntos, a falta de añadir los que se consigan en los tres encuentros finales. Pero hay un dato revelador, a tener en cuenta. El equipo amarillo ha disputado tres ediciones de la Liga con veinte equipos, catorce temporadas con Liga de dieciocho equipos, catorce ediciones con dieciséis equipos. Es decir, ha habido temporadas de 30 jornadas, otras de 34 jornadas hasta llegar a las temporadas de 38 jornadas. Pese a ello hay muchos equipos por debajo de los amarillos, como Villarreal, Rayo Vallecano, Granada, Elche, Hércules, Getafe, Tenerife con 510 puntos….

Cocido el arroz, la Dirección Deportiva tiene que empezar a preparar el nuevo plato, misión complicada pues habrá que conceder bajas dolorosas. También será cruel decidir quiénes serán reincorporados de los cedidos: Carlos Gutiérrez, Jesús Valentín, Tyronne del Pino, José Artiles, Leo Ramírez, Asdrúbal Padrón, Héctor Figueroa, Alfredo Ortuño… Hay que confiar en los hombres que van a escudriñar el mercado para reforzar de verdad el equipo. Es preferible adquirir a uno o dos futbolistas caros, pero de calidad, a cinco o seis de calidad media y seguir confiando que en nuestro desván hay futbolistas que podrán ser muy buenos si se les concede confianza y minutos, como ha ocurrido con Tana Domínguez, Vicente Gómez, David Simón o Nili Perdomo.

Deja un comentario