El descenso de categoría de a UD Las Palmas, de primera a segunda división trajo como consecuencia confeccionar una nueva plantilla, a golpe de talonario para retornar de inmediato al lugar pretendido, la élite del fútbol español. La reducción del presupuesto  se ha reducido de 19 millones de euros a tan solo ocho millones para esta campaña, algo así como bajar al 42,2% . Será necesario, pues, vender para reducir costes de fichas y hacer viable el nuevo proyecto.

La situación actual derivará en la baja federativa de muchos futbolistas, probablemente unos catorce, más varios que serán traspasados para aliviar las arcas del club. Álvaro Lemos ha sido puesto hoy en el mercado, y seguro que seguirán otros con estipendios muy elevados, que, por otra parte, no han ofrecido el rendimiento esperado, como es el caso de David Timor, que ha jugado, se puede decir, por decreto. Fidel Chaves ha sido otra decepción. No pueden cerrar el paso a jugadores como Cristián Cedrés, quien, con continuidad está creciendo partido tras partido.

Hay dos casos significativos. Íñigo Ruiz de Galarreta y Raúl Fernández. Han sido los que han dado mejor nivel de los 16 futbolistas contratados. Otros dos futbolistas se libran de la quema. Rubén Castro con sus goles y Maikel Mesa, entrega y amor por los colores, a quien seguro perjudicó (al igual que al equipo) los continuos cambios de entrenadores. Íñigo y Raúl pueden inyectar una buena cantidad a la entidad. Íñigo, porque parece ser que Athletic Club de Bilbao y Real Sociedad han mostrado interés por el centro campista y Raúl porque tendrá varios clubes de primera interesados en sus servicios, tras la excelente temporada que ha cuajado.

Esto es un comentario, tan solo un comentario, porque quien en realidad decide es el señor Rocco Maiorino…y el Presidente.